Eran cerca de las 9 de la mañana de este sábado, cuando Félix González Subiabre, de 54 años de edad y antiguo bombero e investigador de incendios de la Segunda Compañía de Temuco, iniciaba sus labores habituales a cargo del abastecimiento logístico de un helicóptero privado que operaba prestando servicios a Conaf en el combate de un incendio forestal en la zona de Chaitén.
Repentinamente, recibieron un llamado radial que no podían creer. Un aluvión había arrasado con gran parte de la villa Santa Lucía, muy cerca de donde laboraban los equipos de combate forestal en el sector de Alto Palena.
No dudaron en acudir el llamado de socorro. “Fuimos el piloto, el mecánico y yo en el helicóptero y encontramos una situación sumamente grave. Muchas viviendas arrasadas por el barro, otras quemándose. No demoramos más de 30 o 40 minutos en llegar desde que se produjo la tragedia. Era impresionante”, relata este bombero temuquense.
Fue la primera aeronave en llegar al lugar y mientras Bomberos, Carabineros y militares comenzaban a apagar los incendios y a rescatar víctimas, totalmente sobrepasados ante la magnitud de la catástrofe, el helicóptero que tripulaba Félix González junto a sus dos colegas hizo lo propio para intentar avistar posibles víctimas desde el aire.
Narró que mientras sobrevolaban se encontraron con una familia completa, cuatro personas, atrapadas en medio del barro al interior de lo que quedaba de su vivienda. “Estaba la mitad de su casa totalmente llena de barro y tuvimos que sacarlos por un ventanal del segundo piso”, agrega, lo que pudieron lograr exitosamente gracias a los equipos contra incendio que transportaba la aeronave, y por supuesto, la experiencia del piloto.
Lo mismo hicieron con dos turistas que permanecían atrapados entre barro y rocas, y poco después con una mujer de aproximadamente 30 años, que permanecía todavía en pijama, porque muchas personas fueron sorprendidas durmiendo en sus residencias, literalmente “tragadas” por un verdadero río de lodo y piedras que arrastró las casas con los moradores en su interior.
“La mujer estaba sumida en el barro. Con el mecánico nos lanzamos al barro, logramos sacarla y subirla al helicóptero”, recuerda, hasta que finalmente completaron el rescate de 16 personas, la mayoría de las cuales probablemente habrían perdido la vida, de no mediar la circunstancial presencia de ese helicóptero en la zona.
“A todas las personas las llevamos hasta el puesto de mando, a unos tres kilómetros de la villa Santa Lucía, en la carretera Austral, ahí las esperaba el Samu y las llevaron al hospital”, concluyó Félix González, quien para lograr comunicarse con su familia y con la empresa, debió trasladarse a unos cuatro kilómetros de distancia del lugar de la emergencia, manteniendo una señal de telefonía celular extremadamente débil y logró reportar las primeras imágenes que se vieron sobre el desastre que azotó a esa localidad.
ZONA DE CATÁSTROFE
La Presidenta Michelle Bachelet anunció durante la tarde del sábado que la cifra de fallecidos subió a cinco personas y que 15 permanecen desaparecidas y durante una conferencia de prensa, destacó los rescates realizados por la aeronave que tripulaba este bombero temuquense.
A su vez la Mandataria comunicó que se firmó el decreto de zona de catástrofe en Chaitén y que el Ministerio de Obras Públicas firmó un decreto especial para ir con toda la ayuda necesaria a la localidad.
En la zona precisaron que no existe suministro de electricidad, agua potable ni telefonía.