Hoy sábado, la Primera Compañía de Bomberos de Temuco recordará con una romería que se realizará a las 20 horas, a su capitán Luis Guerrero Rodríguez, uno de los capitanes más nóveles de los Cuerpos de Bomberos de Chile, quien en la plenitud de su vida, a los 21 años de edad, cae en acto de servicio un 3 de diciembre de 1966.
En ese trágico día su abnegado concepto del deber lo lleva hasta el Regimiento «Tucapel», donde se precisaba arreglar la driza del mástil de ese destacamento.
Para esta labor el joven capitán sube por escala telescópica manual, como muchas veces ya lo había hecho, sin embargo, su casco metálico se ve alcanzado por cables energizados, lo cual le provoca un fuerte golpe eléctrico que lo deja asido al tendido eléctrico.
Ante la premura de sus camaradas es bajado de la escala y llevado al Hospital Regional, donde es constatado su deceso.
La partida de este valioso voluntario llena de congoja y pesadumbre al Cuerpo de Bomberos de Temuco, pero en especial a la Primera Compañía quienes no logran comprender por qué el destino los golpea tan fuertemente entregándoles al quinto mártir del Cuerpo. Sus funerales fueron demostración de que Bomberos ha sido siempre una gran familia. Más de cuatro cuadras de formación acompañaron silenciosamente el cortejo fúnebre y fueron imagen exacta de la estima y valoración que se tenía por este voluntario.
El capitán Guerrero era estudiante de la Universidad Técnica del Estado, un hijo ejemplar y un bombero de excepción, muestra de ello fue que la Compañía, no obstante su corta edad, le había entregado la autoridad máxima de la Unidad Bomberil frente a una emergencia.
El capitán Guerrero tenía una marcada vocación de bombero y amor por el servicio comunitario, lo cual refuerza su gran valor como ser humano y llena de gloria su recuerdo, el cual está siempre presente en su querida Primera Compañía.